6 sencillos pasos para ayudarte a desarrollar resiliencia emocional:
Paso #1
Haz una pausa y reconoce tu emoción.
Paso #2
Dale a tu “visitante” un poco de espacio.
Recuerda que no se quedará para siempre porque cualquier emoción es pasajera.
Paso #3
Escucha a tu cuerpo y cómo responde a la emoción: tal vez tus músculos están tensos, tu corazón late más rápido o tienes malestar estomacal.
Trata de reducir la presencia de la emoción en tu cuerpo: por ejemplo, relaja conscientemente el área tensa, dirige una exhalación hacia el lugar donde sientes malestar.
Paso #4
Nombra la emoción. Todo aquello a lo que damos un nombre se vuelve más comprensible y manejable.
Paso #5
Determina la causa de la emoción.
Puedes pensar que las emociones desagradables aparecen de la nada, pero en realidad, cada una de ellas es un mensaje importante.
Las emociones a menudo señalan necesidades insatisfechas. Trata de averiguar qué es exactamente lo que tu visitante está tratando de decirte.
Paso #6
Elige una forma de interactuar con la emoción.
Aquí hay algunas sugerencias:
– Dibujo intuitivo. Toma una hoja de papel y un lápiz, y simplemente pásalos por la hoja. Sólo mira lo que obtendrás. Esta técnica es genial para reducir la tensión.
– Respiración. Cuando determines exactamente dónde está atrapada la emoción desagradable en el cuerpo, concéntrate en esta área y comienza a respirar de manera uniforme, profunda y tranquila; imagina que el aire pasa por esta zona de tu cuerpo. Con cada exhalación, el sentimiento negativo se vuelve menos intenso y te sientes mejor y más tranquilo.
– Sacudidas. Sacude todo tu cuerpo durante unos minutos, de la cabeza a los pies. Saca esta emoción desagradable de tu cuerpo.
Ayúdanos a crecer en Instagram 👇